En este episodio, El Borrego se quita la máscara y deja salir lo que ha guardado por años.
Nos habla del recuerdo más duro de su infancia: ver a su papá llegar b0rrach0 a casa. De lo que significa crecer sin escuchar un "te quiero", de no ser el hijo favorito, de vivir con secretos que nunca se dijeron en voz alta.
Comparte cómo ha terminado tratando a los demás como su hermano lo trató a él y cómo la familia, sin saberlo, ignoró su dolor… porque nadie le preguntó cómo se sentía.
Hoy, frente al micrófono, se dirige por primera vez a ese niño que fue, y se atreve a abrir la herida más profunda: esa pregunta que aún no puede responder ¿quién soy?
Dale play. Porque a veces, hablar del dolor es la forma más honesta de empezar a sanar.