El presidente quiere…

By: Bess Danielson

Narrated by: Virtual Voice

Bueno, si no estás comprando en México o Canadá, deberías. Voté por el presidente Trump y la administración Trump 2.0, y me alegré cuando desmantelaron las instalaciones nucleares en Irán y he estado contento con sus intentos de involucrar a Rusia y Ucrania en las conversaciones de paz. El Día de la Liberación, que se celebra el 2 de abril de 2025, pasará a la historia como uno de los peores días en la toma de decisiones económicas de la historia mundial, no porque sea similar a la Ley Arancelaria Smoot-Hawley, sino porque a los estadounidenses no se les dijo realmente quién fue liberado, ya que no fueron ellos. Fue China. Siendo justos, la administración Trump 2.0 puede que no fuera consciente de esto, ya que viven en una burbuja de filtros lacayos en la que creen que los estadounidenses y el resto del mundo son un montón de masas analfabetas que no saben leer. Sin embargo, el 2 de abril de 2025 fue un Día de la Liberación para China y el resto del mundo, ya que ya no dependerían de Estados Unidos, la OPEP ni otras naciones de Oriente Medio en materia de energía, tras la invención del primer reactor nuclear de torio funcional y reabastecible en el desierto de Gobi. Esto representa una gran noticia para gobiernos, ambientalistas y empresas de todo el mundo. Nunca hemos tenido un mejor momento en la historia de Estados Unidos que ahora para una reforma completa del gobierno y los servicios que se prestan a los ciudadanos, como ocurre ahora, ya que nuestras administraciones municipales, estatales y nacionales están repletas de personas con educación católica en escuelas parroquiales.Funcionan como abogados, banqueros, médicos y empresarios que nunca han servido realmente a nuestro país en ninguna función y son elitistas que tratan al pueblo estadounidense y al resto del mundo como masas ignorantes, similares a los campesinos que poblaban la Europa feudal durante la Edad Media. La administración Trump 2.0 está equivocada en muchos sentidos: los aranceles son un impuesto al pueblo estadounidense que financiará a las élites y los derechos sociales de los baby boomers, y los estadounidenses no deberían tener que pagarlos, ni ningún impuesto para la Seguridad Social o Medicare, ya que estos programas son insolventes y no estarán disponibles en cinco años. Básicamente, una quinta parte de cada dólar de impuestos que se gasta actualmente se destina a pagar los intereses de la deuda nacional, lo cual no es necesariamente culpa de la administración Trump 2.0, pero el gasto permitido por la Ley One Big Beautiful Bill no va a ayudar. La incertidumbre económica causada por los aranceles, la falta de representación del estadounidense promedio a nivel municipal, estatal y federal, y los problemas educativos y de servicios sociales son las fallas fundamentales subyacentes de la sociedad estadounidense que han hecho que cada ciudadano estadounidense sea menos seguro y más pobre, además de generar menos solidaridad entre los ciudadanos de nuestra gran nación. El ciclo continúa bajo la administración Trump 2.0, y la realidad es que Moody's debería haber rebajado mucho más la calificación crediticia de Estados Unidos, ya que...Los ciudadanos estadounidenses no deberían ser responsables de la actual y anterior falta de gobernanza ni del despilfarro fiscal. La administración Trump 2.0, el Congreso y otras ramas del gobierno estadounidense, en colaboración con los neoconservadores con Lululemon, han empeorado la vida de los estadounidenses y casi han arruinado algunas relaciones políticas muy importantes que hemos forjado durante décadas de diplomacia en todo el mundo. La situación en Estados Unidos está lejos de ser buena, ¡y es hora de recuperar nuestro país y nuestros derechos!

“El primer método para estimar la inteligencia de un gobernante es observar a los hombres que lo rodean”. -Nicolás Maquiavelo