¿Pertenecer al club de los que ven el vaso medio vacío o al equipo que más bien lo ve casi lleno? Que nos perdone Hamlet, pero “esa es la cuestión”. Desear algo y creer que es posible alcanzarlo es una noble habilidad que ha demostrado ser un motor que impulsa grandes y positivas transformaciones. 

Cuando está bien aprovechada, la capacidad humana de anhelar un futuro mejor se esmera en guiarnos a través del sendero correcto. No es de extrañar entonces que muchos autores le otorguen un papel estelar en sus obras. Ficción o realidad. Experiencia o pensamiento. Drama o comedia. Prosa o verso. La esperanza es una constante en la literatura porque alimenta un estado de ánimo en el que reina el optimismo. 

Y lo cierto es que… ¿A quién no le gusta creer que, pase lo que pase, todo va a estar bien? ¿Quién no se motiva escuchando el testimonio de alguien que a pesar de la adversidad encontró un sentido a su existencia? ¿Cómo no sentir atracción hacia la persona que cuenta que aun en el negro más oscuro encontró una razón? 

Hemos reunido una serie de poderosas citas de algunos audiolibros que ejemplifican por qué la esperanza es una maravillosa herramienta para enfrentar la vida. 

1. "...aunque la vida no da garantías, a veces sí da regalos...". —Sofía Segovia,

2. "…los días que pasaríamos con ella nos abrirían la ventana a una forma completamente nueva de ver y entender el mundo. Una en la que se puede dejar huella sin dar pasos y todo, incluyendo las peores tormentas, tiene su razón y su tiempo". —Luis Alberto Gónzalez Arenas, María Antonieta Osornio, La mujer que sabe volar [The Woman Who Knows How to Fly]: The Skydiver

3. "Mientras exista este sol y este cielo tan despejado, y pueda yo verlo —pensé—, no podré estar triste». Para todo el que tiene miedo, está solo o se siente desdichado, el mejor remedio es salir al aire libre, a algún sitio en donde poder estar totalmente solo, solo con el cielo, con la naturaleza y con Dios". —Anne Frank,

4. "Experimenté el fracaso y aprendí a animarme para poder unir a aquellos que habían depositado su confianza en mí. Sufrí suficientes rechazos e insultos así que dejé de temerles. En pocas palabras, crecí y recuperé el sentido del humor". —Barack Obama, Una tierra prometida (Unabridged)

5. "Y mi alma baila herida de virutas de fuego. ¿Quién llama? ¿Qué silencio poblado de ecos? Hora de la nostalgia, hora de la alegría, hora de la soledad. ¡Hora mía entre todas!" —Pablo Neruda, Veinte poemas de amor y una canción desesperada [Twenty Love Poems and a Song of Despair] (Unabridged) 

6. "¡Lánzate! Nada puede detener a quien no se da por vencido, y si te llenas de temor en algún punto del trayecto, sabrás que vas por buen camino. El miedo es la señal de que valdrá la pena. Como ya he dicho, habrá pequeñas dosis de temor que te vacunen ante la vida, pero que este no invada tu mente ni comience a hollar tu espíritu para meterlo en una jaula, sino que sea el impulso que te lance como un guerrero que descarga su fiereza en la batalla". —Daniel Habif, Inquebrantables [Unbreakable] (Unabridged)

7. "En la carrera hacia la cada vez mayor incorporación de la medicación en psiquiatría, es importante que no abandonemos las enseñanzas tradicionales de nuestra profesión, aunque a veces parezcan vagas. Somos nosotros quienes aún conversamos con nuestros pacientes, con paciencia y compasión. Aún nos tomamos tiempo para hacerlo. Facilitamos el entendimiento conceptual de la enfermedad, curando con comprensión y mediante el descubrimiento inducido del conocimiento de sí mismo, no solo con rayos láser. Aún utilizamos la esperanza para curar". —Brian Weiss, Muchas vidas, muchos maestros

8. "Y es precisamente esta libertad interior la que nadie nos puede arrebatar, la que confiere a la existencia una intención y un sentido". —Viktor Frankl, El hombre en busca de sentido

9. "Su mensaje es claro: tenemos la capacidad de escapar de las prisiones que construimos en nuestras mentes y podemos elegir ser libres, sean cuales sean las circunstancias de nuestra vida". —Edith Eger, Jorge Paredes, La bailarina de Auschwitz

10. "No se le puede pedir más a una infancia, y yo la tengo ahí, encapsulada, como un tesoro que me ha permitido entender que en la melancolía o en la pena siempre hay un recoveco por el que se filtra la alegría. Y que la alegría a su vez ha de estar abierta a la tristeza para no convertirse en un sentimiento estúpido y banal". —Elvira Lindo, A corazón abierto