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En los años veinte, la comunidad india de los Osage en Oklahoma era la población de mayor renta per cápita del mundo. El petróleo que yacía bajo sus propiedades les convirtió en millonarios: construyeron mansiones, tenían chóferes privados y mandaban a sus hijos a estudiar a Europa. Pero un espiral de violencia asoló esta comunidad indígena cuando sus miembros empezaron a morir y a desaparecer en extrañas circunstancias. La familia de una mujer Osage, Mollie Burkhart, se convirtió en un objetivo principal.

Hoy en día en Estados Unidos hay más de quinientas naciones indígenas reconocidas por el Gobierno federal que comprenden casi tres millones de personas, descendientes de los quince millones de nativos que habitaban esas tierras. El programa genocida que los colonos desarrollaron durante siglos ha sido omitido, en gran medida, de la historia, pero, ahora, por primera vez, la historiadora y activista Roxanne Dunbar-Ortiz nos ofrece una historia de Estados Unidos contada desde la perspectiva de los pueblos indígenas.

Fray Ramón Pané fue probablemente el primer europeo en aprender una lengua indígena americana, el taíno, que se hablaba en la isla La Española, a la que acompañó a Cristóbal Colón en su segundo viaje al nuevo mundo. Cuando tras haber pasado 26 años en aquellas tierras desconocidas vuelve a su Barcelona natal, lo hace con un impresionante legado: la historia del mayor descubrimiento de la humanidad.Su llegada a la isla de La española junto con los aventureros bajo el mando de Cristóbal Colón, se constituiría en una de las mayores gestas conocidas por el hombre, pero también en el comienzo del sometimiento de voluntades por la fuerza.

El célebre visionario y curandero de los oglalas lakotas Alce Negro (1863-1950) conoció al distinguido poeta, escritor y crítico John G. Neihardt en 1930 en la reserva de Pine Ridge, en Dakota del Sur, y le pidió que compartiera su historia con el mundo. Sus desgarradoras visiones sobre la relación entre el ser humano y la tierra han convertido este libro en un clásico que atraviesa múltiples géneros.

Es una pena ver a una nación tan brillante de personas asesinadas por nuestros antepasados sobre la codicia, el odio y la intolerancia por la sabiduría y la manera de como vivían los nativos americanos. A pesar de lo que las escuelas públicas enseñaban a nuestros hijos, los nativos americanos no eran los "salvajes", como aprendimos en la escuela.

Uno de los capítulos más oscuros y más crueles de la historia de los Estados Unidos ocurrió cuando el joven gobierno de la nación decidió expulsar a los pueblos nativos de sus tierras para lograr sus propios beneficios. Después de haber ayudado a los colonos durante cientos de años, cinco tribus nativas americanas encontraron cada vez más difícil relacionarse y confiar en el país que una vez había actuado como su aliado.

"La historia está escrita por los vencedores", afirmó el triunfador Winston Churchill. ¿Pero eso compromete la verdad de lo que realmente sucedió? La propaganda siempre ha desempeñado un papel crucial en cambiar el rumbo de la opinión e influir en ella, y en algunos lugares es más pronunciada que en la masacre masiva de los pueblos nativos en América del Norte y del Sur.

En Las Guerras Indias Americanas: Una guía fascinante de los conflictos que ocurrieron en América del Norte y su impacto en las tribus nativas americanas, incluyendo eventos como la masacre de Sand Creek.
 

La palabra muisca, significa en lenguaje nativo persona o gente. Y según muy serias investigaciones los nativos muiscas parecen descendientes de los chinos que poblaron la América Central, y de ahí sin duda pasaron a Panamá, territorio que antes pertenecía a Colombia, Perú, Ecuador y otros lugares. Sí, a los “Chibchas” o “Muiscas” los hacen descendientes de los chinos, por cuanto el legisla cultural y legendaria, cuna a la vez de los primeros inventos y de una gran civilización. De la misma manera se afirma que los fenicios también se establecieron en América.

La masacre de Wounded Knee generalmente se pasa por alto en los libros de texto, hablando del evento de manera generalizada. Pero una representación tan generalizada socava el impacto real y la importancia de los eventos que sucedieron en ese fatídico día, convirtiéndolo en uno de los eventos más trágicos en la historia de los nativos americanos. 

Una guía fascinante de los conflictos que ocurrieron en América del Norte y su impacto en las tribus nativas americanas.

La política del destino manifiesto afirmaba que Estados Unidos era una nación moralmente superior que tenía derecho a construir un imperio desde la costa este hasta la costa oeste, en detrimento de los nativos americanos que se interpusiera en su camino. Este libro documentará el Sendero de las Lágrimas, sacando a la luz muchos sucesos que ocurrieron en el trasfondo y describiendo al mismo tiempo a algunos destacados jefes nativos americanos, como el jefe seminola Abiaka y el jefe cheroqui John Ross, y a algunos de los europeos estadounidenses con los que se enfrentaron.

Son pocos los momentos de nuestras vidas en los que nos encontramos con un texto electrizante. Nos da esa sensación de que "¡esto era lo que me estaba perdiendo!". En el mundo de los nativos norteamericanos, donde la comunicación oral ocupa el lugar de la palabra escrita, esa revelación suele ocurrir cuando escuchamos por primera vez - o comprendemos por primera vez– la historia del origen, la naturaleza y el carácter de nuestra gente.

La península de Yucatán, una de las pocas penínsulas del mundo en proyectarse hacia el norte fue, ya desde su formación, lugar de hechos extraordinarios. Considerada hoy como un lugar de extraordinaria belleza natural, fue descrita como “un país muy triste” por los primeros visitantes españoles.

A partir de una experiencia personal con la taxidermia, y rodeado de anécdotas sobre el traslado de huesos, Cristóbal Marín narra en esta crónica las peripecias de su viaje en búsqueda de información sobre el paradero y destino de los fueguinos que murieron tanto en Londres como Europa durante el siglo XIX luego de ser expuestos en zoológicos humanos y ferias o llevados, siempre contra su voluntad, para ser analizados por científicos y anatomistas y, en algunos casos, educados en los valores occidentales con el propósito de que regresara "civilizados" a sus tierras.