El Jardín que Aprendió a Esperar Podcast Por  arte de portada

El Jardín que Aprendió a Esperar

El Jardín que Aprendió a Esperar

Escúchala gratis

Ver detalles del espectáculo

El alma humana es como un jardín.

Hay momentos de lluvia, de espera, de invierno y de florecer.

Dios trabaja en silencio, debajo de la tierra, en las raíces que nadie ve.


A veces te sientes estancado, sin resultados, sin señales. Pero justo ahí, en esa quietud aparente, tu raíz está profundizando.

Está aprendiendo a sostener tu propósito.

El mundo mira las flores, pero Dios mira las raíces.


Florecer antes de tiempo es como abrir los ojos antes del amanecer: te pierdes la belleza del proceso.

La fe verdadera no es creer cuando ves brotes, sino seguir confiando cuando no hay señales de vida.

Todavía no hay opiniones