====================================================
SUSCRIBETE
https://www.youtube.com/channel/UCNpffyr-7_zP1x1lS89ByaQ?sub_confirmation=1
=================================================
DEVOCIÓN MATUTINA PARA MENORES 2025
“PALABRITAS DE CORAZÓN”
Narrado por: Tatania Daniela
Desde: Juliaca, Perú
Una cortesía de DR'Ministries y Canaan Seventh-Day Adventist Church
===================
|| www.drministries.org ||
===================
08 de Septiembre
Kilómetros de nostalgia
«Que el Señor les guíe el corazón a un entendimiento total y a una expresión plena del amor de Dios, y a la perseverancia con paciencia que proviene de Cristo». 2 Tesalonicenses 3:5.
Crecí a 3,141 kilómetros de mi abuela María. Cuando ella nos visitaba, una vez por año, viajaba tres días en ómnibus. Eran los días que esperaba con más ansias.
Mi abuela traía muchas maletas, y en ellas siempre había un regalito para mí y para mis hermanas. Todavía hoy ella mantiene esa costumbre. Aunque ya soy grande, ella aún nos da regalos, y mi corazón se alegra de que alguien a quien amo tanto me recuerde.
Con ella cerca, nos volvimos «pegajosos», como solo los nietos pueden entender. Juntábamos los colchones en la sala e incluso dormíamos al lado de ella. Visitábamos parques, paseábamos por museos e íbamos a la playa.
Y así como el día que llegaba la abuela era el más feliz, el día que se iba era el más triste. Ella lloraba, nosotros llorábamos... no había manera de disimularlo. Sabíamos que recién nos veríamos al año siguiente y que una gran distancia nos separaba.
En una ocasión, ella me confesó un bonito secreto:
-Tú sabes que yo no estoy cerca siempre, porque vivo lejos. Pero hay Alguien que siempre estará cerca de ti. Eso es increíble, porque también está aquí conmigo. ¡Está en todas partes! Dios está cuidando de mí y de ti. Allá en al cielo no habrá más distancias entre nosotros.
Las lágrimas inundaron mi rostro. Dios es omnipresente. Eso significa que está contigo mientras lees esta historia, está cerca de mí y también de mi abuela María. ¡Qué Dios maravilloso!
Mi oración: Querido Dios, tu presencia en mi vida es mi mejor regalo.
¿Vives lejos de alguien especial, como un amigo querido, tus abuelos o tus primos? Hagan en familia una videollamada con esa persona. Antes de terminar la llamada, ¡oren juntos!