RUT

El amor de Dios nos persigue

De: Enzo Verdugo Biber

Narrado por: Virtual Voice

La historia de Rut es conocida y apreciada por la mayoría de los lectores de la Biblia. A pesar de las diferencias culturales, la temática no es difícil de entender y uno se identifica casi de forma natural con los personajes de este drama. No obstante, si a esa comprensión llana del texto agregamos el entendimiento de la época, las usanzas y características tanto de las costumbres como del lenguaje, la riqueza de este libro brilla aún con mayor fuerza. Por eso escribo este comentario bíblico, con el propósito de que el lector pueda sacar todo el provecho posible y profundice en las enseñanzas mientras disfruta de la narrativa.
El tema central desarrollado en este comentario queda plasmado en el título: “El amor de Dios nos persigue”. Se trata de un asunto que sobresale tanto en al Antiguo como en el Nuevo Testamento, y llega a ser un eslabón de continuidad a través de toda la historia bíblica. En este pequeño libro de Rut, casi escondido entre las páginas del Antiguo Testamento, podemos hallar trazas del evangelio, en el sentido de que nuestro Dios está siempre pendiente de nosotros y su amor leal en verdad nos persigue, aunque a veces no seamos capaces de notarlo con claridad.
Como ilustran las famosas parábolas de Lucas 15, Noemí es para Dios como una oveja perdida, una moneda extraviada o un hijo descarriado. Las circunstancias de la vida, junto a las decisiones de sus familiares y las suyas propias, la han dejado desamparada, amargada y deprimida. Todavía conserva el temor a Dios, pero en el fondo de su alma culpa al Todopoderoso por todas esas pérdidas. Sin embargo, es el momento preciso en su vida para poder ver su pasado con más claridad y llegar a notar que el Señor la busca con un amor fiel que no solo puede sacarla adelante, sino llevarla al real propósito de su existencia.